Cenicienta

He reconocido de entre la multitud a la cenicienta,
princesa,
princesita en cuentos sin hadas,
por que esta no debía retirarse a las doce
ni dejar sus zapatitos de cristal tirados en una escalera.
ella debía dejar sus ropas en orden de abrigo por el piso de la habitacion
que expele hedor...
pegajoso, pajoso, suelta, aprieta, succiona...
hhh... succiona... hhh
princesita desnuda baila canciones,
melodías, pianos al compás de un hilillo de saxo
(dije saxo no sexo)
fecunda.
Los muertos de hambre divisan por la cerradura
movimientos duros, sucios,
adentro afuera, afuera adentro
silencios,
silencios jadeantes,
poses alfabéticas, numerillos estrellados,
las manos sudan,
el estomago también.
Junto con ellos alcance a ver por entre partículas sus ojos blancos,
delataban orgasmos, muchos orgasmos.
Cenicienta con vestidos coloniales
hoy te vestiste de negro, vampiresa blondiana no compraste cigarrillos.
Apretaste la cosita, el paciente se queja, le atrapaste la cabecita,
termina ahora, termina,
se te escapo el suspiro, se te escapo la baba,
llovió sobre la cama los restos de la boca jadeante,
retractaste en el ultimo segundo la agonía de tu sexo
(ahora si dije sexo)
mataste al muchacho,
te quedaste con el miembro,
te quedaste con su orgullo
guardaste su vida en la cajita que te condecora como princesita,
en el papel higiénico escribiste su epitafio,
un sexo mato a otro castigándolo por no regalarle a tiempo un orgasmo,
princesita, princesita,
tu adicción te dejara sin placeres,
princesita las mujeres son más sentimentales,
tal vez sea eso lo que buscas,
princesita
¿Juguemos a ser cenicienta?